En los últimos años la importancia que se otorga a nuestras cejas dentro del conjunto de nuestro rostro, en cuanto a proporcionarle armonía y expresividad, no ha dejado de crecer. En general, se aboga por la naturalidad y, siempre respetando esta, realizar pequeñas acciones que saquen lo mejor de nosotras/os mismas/os.
Atrás quedan las modas en las que las cejas se reducían a su mínima expresión, dando paso a diseños mucho más naturales en los que la tendencia es la de respetar lo máximo posible el aspecto original de la ceja, sirviéndonos únicamente de la depilación para conseguir un aspecto armonioso y eliminar solo aquellos pelos innecesarios que crecen “fuera de su sitio”.
Afortunadamente, contamos además con novedosas técnicas como la micropigmentación o el microblading, que permiten ir más allá en el diseño de nuestras cejas y conseguir el mejor aspecto posible para ellas.
Y es que, en muchas ocasiones nos encontramos con cejas que no tienen la forma que nos gustaría y más nos favorece. Puede ser que su forma no sea la adecuada, que nos falte vello en las partes necesarias o carezcan de densidad.
La forma de nuestras cejas depende de muchos factores. En primer lugar, los genéticos, es decir, que tendremos una forma y densidad determinadas desde nuestro nacimiento.
Pero los factores sobrevenidos son igual, o más importantes. Desde problemas de salud, como dermatosis que han influido drásticamente en el crecimiento del vello, hasta una depilación incorrecta. Las cejas son muy sensibles a la depilación, de tal forma que, mal hecha, puede llegar a deformar de manera definitiva su forma original.
Como decíamos, en la actualidad contamos con nuevas técnicas capaces de solventar, desde el punto de vista estético, la mayoría de las problemáticas relacionadas con unas cejas que no tienen la forma más idónea.
La micropigmentación es una sencilla técnica que realizada por manos expertas nos permite cambiar radicalmente el aspecto de unas cejas. Pocos tratamientos ofrecen resultados tan notables, capaces de cambiar y mejorar el aspecto de nuestro rostro.
La micropigmentación consiste en la aplicación de pigmentos a nivel subcutáneo. Utilizando diferentes técnicas (solas o combinadas) como el diseño pelo a pelo o el difuminado, se consigue cambiar visualmente la forma de la ceja. De esta forma se puede agrandar la ceja, darle una forma más estética, crear la sensación visual de tener más pelo…